El presidente Juan Orlando Hernández quedó ayer a un paso de ser reelecto en Honduras al finalizar el escrutinio de los comicios del 26 de noviembre, con el país bajo estado de sitio y creciente tensión por denuncias de fraude.

Según el conteo final del Tribunal Supremo Electoral, Hernández, de 49 años, del derechista Partido Nacional, mantenía una leve ventaja sobre el popular presentador de televisión Salvador Nasralla, de 64, de la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura, comandada por el derrocado mandatario Manuel Zelaya.

El gobierno decretó el viernes estado de sitio durante diez días, incluyendo un toque de queda nocturno, en reacción a las movilizaciones, violentos choques con policías y militares, y saqueos de negocios en varias ciudades del país por denuncias de fraude e irregularidades en la elección.

El opositor Nasralla, un presentador de televisión, dijo a AFP que no puede “aceptar nunca” los resultados que divulgó el TSE, pues a su juicio “no son oficiales ni definitivos”, y reclamó revisar 5.173 actas en las cuales asegura que estuvo el “fraude”.

Por su parte, Hernández llamó a respetar el plazo legal de impugnaciones antes de proclamar al ganador de las elecciones y, en tono conciliador, llamó a todos los sectores del país “a construir una nueva Honduras”.

Al menos una joven de 19 años resultó muerta en los enfrentamientos y dos policías fueron abatidos a tiros cuando intentaban hacer cumplir el toque de queda en el departamento occidental de Olancho.

El subcomisionado de la Policía Nacional, Jair Meza, dijo a telenoticieros locales que hasta el momento más de 700 personas han sido detenidas por violar el toque de queda nocturno.

En ciudades de todo el país, miles de opositores salieron a las calles sonando cacerolas para reclamar la victoria de Nasralla, durante la noche del domingo y madrugada del lunes, desafiando el toque de queda nocturno.

Con música de la campaña opositora en equipos de sonido a alto volumen, los manifestantes gritaban “Fuera JOH” por las iniciales del presidente hondureño, que solo pudo competir gracias a un polémico fallo judicial que avaló que postulara a la reelección, pese a que la Constitución lo prohíbe.

 

Lejos de estar terminado

Con 99,96 % de las actas contadas, Hernández aparece al frente con el 42,98 % de los votos mientras que Nasralla obtenía el 41,39 %.

Sin embargo, la misión de observadores de la Unión Europea (UE) señaló que no debe declararse un ganador mientras haya reclamos e impugnaciones.

“El proceso electoral está lejos de estar terminado”, advirtió la eurodiputada portuguesa Marisa Matias, en rueda de prensa.

El TSE anunció este lunes que había finalizado el conteo de votos, pero aún resta contabilizar 18 mesas de votación.

 

 

OEA llama a un acuerdo entre los candidatos de Honduras

La Organización de Estados Americanos (OEA) instó ayer al presidente hondureño, Juan Orlando Hernández, y al opositor Salvador Nasralla, a llegar a un acuerdo para la revisión de actas y verificar supuestas irregularidades en las elecciones, para superar así la crisis en el país por sospechas de fraude.

“El único camino posible para que el pueblo hondureño pueda aceptar y (...) reconocer ganador en este proceso electoral, es que se llegue a un acuerdo entre los principales candidatos”, declaró el jefe de la misión de observadores de la OEA, el expresidente boliviano Jorge Quiroga, al presentar un informe preliminar.

Quiroga señaló que ambas partes deben acordar el cotejo de 5.173 actas electorales, en las cuales el partido de Nasralla, la izquierdista Alianza de Oposición Contra la Dictadura, asegura que estuvo el “fraude”.

“El estrecho margen de los resultados así como las irregularidades, errores y problemas sistémicos que han rodeado esta elección no permiten a la misión tener certeza sobre los resultados”, afirmó Quiroga.